La eficiencia energética es una de las preocupaciones de actualidad en el campo de la arquitectura. Se requieren edificios más eficientes: más baratos de mantener, y que además cuenten con una menor huella energética. Uno de los aspectos
con mayor repercusión sobre la eficiencia energética en los edificios es la entrada de aire exterior; que de ser involuntaria se llamará infiltración.
El proyecto de investigación infiles es un proyecto nacional financiado por el Ministerio de Fomento y el Ministerio de Economía y Competitividad, coordinado por la Universidad de Valladolid, que busca conocer la hermeticidad de la envolvente
arquitectónica en el sector residencial español (y, por tanto, la tasa de infiltraciones que origina), caracterizando y cuantificando tanto los caudales como los puntos débiles de las soluciones constructivas habituales, y estableciendo un
procedimiento de evaluación del exceso de consumo energético mediante un estudio experimental que se realizará en toda la geografía española.
El procedimiento experimental que consiste en un ensayo de presurización del volumen interior del edificio, denominado comúnmente BlowerDoor Test, se basa en las normas EN 13829 e ISO 9972:2006, y es habitual ya en muchos países de nuestro
entorno, que recogen exigencias normativas concretas para verificar la correcta ejecución de las obras.